¿Será porque vivimos una época en la que el tiempo (libre) es un bien escaso? En realidad no sé la razón, pero el caso es que cada vez soy más aficionado a los cortos (corto y mediometraje).
Si lo piensas bien, ¿de verdad hace falta entre 1’5 y 2 horas para contar una historia? ¿O es más bien algo que el mercado ha favorecido? Claro, ya que pagas casi mil pelas por ver una peli, al menos que te tengan un buen rato sentaíco…
Algunas lo merecen, no digo que no. Pero otras muchas se podían haber quedado en 30 o 40 minutillos, y se hubieran salvado de la quema.
Al hilo de esto, está ocurriendo en Graná el XVI Festival de Jóvenes Realizadores , y ayer mismo estuve en la Muestra de cortos granadinos (donde pude coincidir con el archiconocido e insigne granaíno M.A.S. Cogolludo -foto- que parece tener su corto ya bastante avanzado).
Me gustaron (los pongo aunque ya ha pasado porque estas cosas se suelen encontrar luego fácil por la red):
- El Cruce, por dos argentinos que parecían saber reirse de ellos mismos.
- Homeland, por ternico, y tener un saborcillo distinto.
- Inteligente, aunque para mi gusto le sobraba metraje.
- La fuga de Aigoor, por simpático y bastante bien realizado.
- Los cambios posibles, por desgarradoramente posible.
- Tres pasos para el retorno (documental), por contar su verdad acerca de todo el rollo tumba-lorca.
No me gustaron (y mira que soy de embudo ancho):
- L’ultimo elefante, porque sencillamente no lo entendí (quizá ese era el objetivo, quedarse con el personal).
- Sueño tierra, porque para lo que contaba casi hubiera bastado una foto (mejor encuadrada).
Y me despido con uno que nada que ver con este festival, pero que resume muy bien la idea que quería transmitir al principio:
Le hablo un arkángel bastante cortico.