VacacionesParisinas


Alto en el caminoUf… Menos mal que me fui de viaje al principio de las vacaciones, porque la tontería que tengo encima sumada a la depresión de la reincorporación al curro debe ser la leche. Y es que diez días pateando París dan para cansarse mucho.

Durante el viaje fui anotando cosas en la moleskine (que me regaló la rubia en Graná, paradójicamente), así que supongo que algo podré rescatar.

Por cierto, ahora que ya tengo moleskine puedo constatar que si escribes en una libretilla que se cierra con una goma suceden cosas a tu alrededor. Si intentas hacer algún dibujo, ya es la leche: la gente te mira raro, intentan buscar algo interesante en lo que estás mirando… Creo que a partir de ahora llevaré también una petaca con absenta, unas gafas de pasta, pipa,… y me pondré a dar el coñazo en los bares.

Practicaré por aquí mientras tanto.

Le habló un arkángel dispuesto a aburrir al personal.


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