UnaMañanaDeDomingo


Anoche cuando estaba quedandome dormido me propuse que esta mañana tenía que hacer algo más que dormitar hasta las 3 o las 4 en el sofá agarrado a las enaguas de la mesa camilla como si se me fuera a escapar el alma por un rinconcillo que no me tapara con ellas. Que tampoco es mala opción, pero luce poco el fin de semana.

Así que pasadas las diez he salido a la calle, con la excusa de pasarme por el mercadillo, la Marcha Verde, que se dice por aquí, supongo que recordando historias de marroquíes, desiertos y libertades. O no.

Conforme salía me han asaltado en el patio (¿ves?, si me hubiera quedado en casa)… Dos elementos de 5 y 8 años, más o menos. Compranos algo, me dicen, mientras me enseñan un puestecillo improvisado en uno de los bancos que normalmente ocupan mis encantadoras (aunque algo marujas) vecinas ;-) Cuando le he echado un ojo a lo que «vendían» me ha faltado tiempo para salir corriendo antes de ser víctima de la ira de algún padre-madre: collares, pendientes, libros,.. Lo que habían pillado por ahí, mucho me temo que sin el permiso de sus dueños. Nos hemos hecho amiguetes, eso sí. Pero mientras salía por patas ;-)

Minutos después estaba yo tomándome un cafelillo para disolver las legañas cuando he sido testigo de como se le puede joder el domingo a un dueño de bar. Es muy fácil, solo tiene que llegar un amigo suyo y preguntar por el partido de ayer, con la excusa de no haberlo visto. Tras insistirle 4 o 5 veces con una sonrisita hijoputesca, y ante la aparente indiferencia del sufrido empresario-trabajador me he dado cuenta del pastel: era un ataque directo a la línea de flotación, con resultado inmediato… Un encabronamiento del camarero que casi pago yo también cuando muy bajito le he dicho que me cobrara-muchas-gracias-oigaustéqueyonolehedichoná. Joder como está el patio, pobre hombre que berrinche se ha llevado.

Total, que a la Marcha Verde he llegado. Y como hacía mucho que no me paseaba por allí, pues he echado un ratico viendo puestos, siendo increpado por dependientes por echar fotos (afortunadamente han entendido que era más una cosa panorámica que de retrato, no se si me explico), y comprobando que entre un mercadillo de este tipo y un centro comercial hay una diferencia fundamental: los de aquí si ponen interés en vender.

Hasta me he comprado unas bragas (a quinien). De estas que se ponen en el cuello, que no tenía ningunas.

Pero como de todo se cansa uno, pues he cambiado radicalmente de plan, y he terminado en la fuente del Avellano. Por echar un rato. Claro que antes me he dado mi paseico por el Albaycín, haciendo fotillos cual guiri cualquiera. No me ha gustado especialmente ninguna, así que no las publico…

Y así se puede gastar una mañana de domingo. Yo me lo he pasado bien.

¡Ah! Al llegar a mi casa me ha tocado pagar el impuesto revolucionario. Mis dos recientes nuevos amigos lo han entendido justo, al no comprarles nada la segunda vez. Yo también ;-)

Le habló un arkángel dando una vueltecilla por Graná un domingo cualquiera.


6 respuestas a “UnaMañanaDeDomingo”

  1. Vaya plan más buenísimo. A mí me encanta salir los domingos por la mañana a pasear, pero hace un siglo que no lo hago.

    Cada sábado me lo propongo, pero al final me da pereza porque no me gusta salir sola y a nadie le apetece acompañarme. Voy a tener que dejar de depender de los demás :)

  2. A mí también me gusta,… Pero esto lo hago cada x meses, siendo x >= 3 (más o menos) :P

    Y luego, es que es una cosa muy particular… Concretamente el dia de hoy es que yo sabía que tenía que estar solo, conmigo y mi mismidad. Y no porque estuviera chungo ni nada por el estilo, solo que lo sabía. Hay cosas que s?lo me salen estando solo, que le vamos a hacer…

  3. Eso no es un paseo, es ¡una maratón!, nada más que recorrerse un mercadillo equivale a 2 horas de gimnasio y luego ir a la fuente del Avellano y al Albaicín, puf con la de cuestas y encima empedrado, estás hecho un deportista. Por cierto, bonito paseo, podrías poner las fotos de la Marcha Verde que eso es un documento sociológico de valor incalculable, y ya en serio.. las fotos de mercados son las mejores, ningún sitio mejor para captar toda la gama de colores posibles.

  4. Ejem… Muchas gracias… Pero… iba en moto :P

    Con las fotos, es que casi me juego el tipo… A uno de los vendedores no le hacía mucha gracia eso de que le arretrataran el puesto. Cosas de cada uno…