Y mira que son jodidos los domingos…

¿Sabes lo peor? Que durante el día de hoy tampoco es que me haya agobiado demasiado… Pero en cuanto me he quedado solo, cataplof, domingazo.

Si que es cierto que esta tarde algo se me vería, porque Bussy me ha dicho:

Me estás recordando a aquel día que estábamos en la cafetería y tu como de espectador, y de repente te dio un punto raro y te fuiste.

Se refería a lo que conté en este post… Afortunadamente, como hemos comentado, no está la cosa en esa situación. Afortunadamente.

Cambiando de tema, y siguiendo con lo mismo,… como necesitaba relajarme, me he puesto a trastear afotos…

Y ha salido ese churro… Pero bueno, así me sirve de excusa para enseñarte (parcialmente, sí) un retrato que he re-descubierto ordenando ayer mi habitación-de-la-basura. Debo de tener unos 6 o 7 años ahí, y no es demasiado bueno, pero me ha hecho ilusión el reencuentro (la carga sentimentaloide de las cosas, supongo).

Desdramatizando un poquito mi domingazo, ahora tengo un pequeño jaleo decisorio-cuántico, explícome… Me tiré ayer desde las 12 de la mañana hasta las 5 de la tarde sin parar ordenando, tirando y redistribuyendo cosas en la anteriormente mencionada habitación-de-la-basura, el sitio que alguna gente llama trastero, y que en mi caso aún guardaba restos de la obra de la reforma que hace más de un año hice al mudarme aquí.

Bueno, pues la idea de reorganizar aquello era construir una megajaula/campo-de-concentración para mi Trini, y su posible futura pareja. El caso es que después de tenerlo todo «ordenadito», dandole vueltas a la cosa, he decido que no, que la Trini se queda en el salón, allí cerquita mia, y que si viene otra, pues habrá que ampliar jaula, o quitar algo de la habitación, o algo. Pero la trini se queda en su sitio. Que lastimica la pobre, allí sola. Nonononono…

Ya contaré que pasa al final.

Le habló un arkángel contento de que haya salido el sol por fin.